"EL BUEN SAMARITANO...Y LA OVEJA DESCARRIADA"
Amor...Sin palabras.
Cientos de encuentros…
Veladas miradas…
Reunión de amigos…
Recordar tu risa, tu cara…
Tus labios de grana…
Tu limpia mirada.
Hembra hecha…
De mujer de mundo…
De aventurera exaltada…
De intrascendente mirada…
Y de suave saludo.
Te conozco en sueños…
Tus caricias, tus besos…
Tus susurros, de hembra en celo…
Llenan mi pobre cerebro.
Te has puesto un vestido azul…
Sabes de mis gustos…
De mis anhelos, de mis ansias…
De mis sueños.
Tu instinto de mujer…
Ha receptado mis celos…
Mi angustia, mi timidez…
Y mi ignorancia en mi Destino.
Que transpiran por mis poros…
Que envenenan mis sentidos…
Y abotárga mi cerebro…
Entre crueles desatinos.
¡¿No juegues conmigo?!...
Sabiendo lo que ya sabes…
Lo que intuyes…
De que quiero ser tu amante.
Sé, de tus aventuras…
Lo sé, por diez mil voces…
Por cien que se dicen hombres…
Y por cientos sin cultura.
¡Y no son más que chiquillos!...
¿Te vas a venir conmigo?...
¡¡Te voy a entregar mi casa!!...
¡Mi amor!... ¡Y mis apellidos!
“Aquella que vive del pecado, es más fiel…
Que un cura samaritano”
Cientos de encuentros…
Veladas miradas…
Reunión de amigos…
Recordar tu risa, tu cara…
Tus labios de grana…
Tu limpia mirada.
Hembra hecha…
De mujer de mundo…
De aventurera exaltada…
De intrascendente mirada…
Y de suave saludo.
Te conozco en sueños…
Tus caricias, tus besos…
Tus susurros, de hembra en celo…
Llenan mi pobre cerebro.
Te has puesto un vestido azul…
Sabes de mis gustos…
De mis anhelos, de mis ansias…
De mis sueños.
Tu instinto de mujer…
Ha receptado mis celos…
Mi angustia, mi timidez…
Y mi ignorancia en mi Destino.
Que transpiran por mis poros…
Que envenenan mis sentidos…
Y abotárga mi cerebro…
Entre crueles desatinos.
¡¿No juegues conmigo?!...
Sabiendo lo que ya sabes…
Lo que intuyes…
De que quiero ser tu amante.
Sé, de tus aventuras…
Lo sé, por diez mil voces…
Por cien que se dicen hombres…
Y por cientos sin cultura.
¡Y no son más que chiquillos!...
¿Te vas a venir conmigo?...
¡¡Te voy a entregar mi casa!!...
¡Mi amor!... ¡Y mis apellidos!
“Aquella que vive del pecado, es más fiel…
Que un cura samaritano”
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