"ZAPATERO PIDE A LOS SINDICATOS "PROPUESTAS", PARA VOLVER ABRIR EL DIÁLOGO, TRAS LA HUELGA GENERAL". "FELIPE GONZALEZ, LE PIDE QUE SIGA ADELANTE".

"Zapatero pide a los sindicatos

"propuestas", para abrir el diálogo

tras la huelga general".

"Zaragoza."EFE. 26.09.2010."El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha garantizado hoy, que tras la huelga general del próximo miércoles mantendrá el diálogo y la concertación con los sindicatos, para lograr reducir el desempleo y ha apelado a su responsabilidad, para que planteen propuestas con ese objetivo".

"Los precedentes de González y Aznar:

"Se paró hasta el aliento"

"Casi con un escalofrío, pese al tiempo transcurrido. Así fue como el propio Felipe González lo rememoró, el pasado mes de marzo en Sevilla, y precisamente en un acto del PSOE junto a Cándido Méndez, la gran huelga general que sufrió el 14 de diciembre de 1988".

"Y no era la primera, pues los sindicatos ya le habían montado una en 1985. "La siguiente fue la huelga de verdad, política. Se paró hasta el aliento", recordó González. Sus palabras, aquel día en Sevilla, tenían un doble destinatario".

"Por una parte, el propio Méndez, a quien tenía delante, y que en aquel momento aún se resistía a convocar una huelga general a Zapatero, aunque la posibilidad ya se presumía inevitable, si finalmente el diálogo social no llegaba a nada y el Gobierno reformaba el mercado laboral por decreto ley".

"Y por otra parte, más significativa, el mensaje de González, era un recado para el propio Zapatero, a quien vino a reclamar valentía para afrontar las reformas estructurales necesarias, sin arrugarse por la contestación sindical".

"Es más, González recordó a renglón seguido, que la huelga general del 14-D de 1988 "nos llevó seis meses después, a ganar las elecciones por mayoría absoluta". Lo que no dijo el ex presidente del Gobierno, es que el PSOE sí perdió, pese a todo, un importante número de votos y diputados".

"Y también supuso una dolorosa fractura, entre el PSOE y la UGT. Antes de liderar la huelga, el entonces secretario general del sindicato, Nicolás Redondo, ya había abandonado su escaño en el Congreso, en rechazo a la política laboral y social de González tras votar contra los presupuestos del Estado para 1988".

"El principio del fin de Aznar:

"Nada que ver con la de 1988, ni en seguimiento ni en su final, pero ocho años después se puede decir que aquella convocatoria, que paralizó la industria, la construcción y el transporte, pero no el comercio ni los servicios, fue el principio del fin de la era Aznar".

"El entonces portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, dio un golpe de efecto a las ocho de la mañana, que muchos creen que hizo fracasar el paro. Se presentó en el Congreso con los periódicos bajo el brazo, la mejor demostración, vino a decir, de que la huelga había fracasado: los periódicos habían salido. Esa imagen llegó a las casas a las ocho de la mañana a través de la televisión, y caló en muchos trabajadores indecisos, sobre si ir o no a trabajar; en ese momento decidieron ir a sus puestos de trabajo".

"A partir de ahí, ya no hubo sensación de paro total, como la que hubo en la huelga general que los sindicatos montaron a Felipe González en 1988, con lo que Aznar respiró. Al día siguiente los titulares de los periódicos, se hacían eco de esa sensación: "Huelga desigual", tituló La Vanguardia, con la apostilla de que había paralizado la industria, pero no el comercio ni los servicios".

"Sin embargo, sus consecuencias, fueron las propias de una huelga general triunfante. Convocada el día antes de que se aprobara el decreto de reforma laboral, que la provocó, y el mismo día que se celebraba en Sevilla, una cumbre europea, final de la presidencia española, veinte días después daba lugar a un cambio de Gobierno, que incluía al entonces ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio".

"Le sucedió Eduardo Zaplana, que una semana después se reunió con los sindicatos, con los que acordó, en tres meses, un nuevo decreto que eliminaba los aspectos más conflictivos de la reforma laboral".

"Zapatero ha aludido a la huelga general, por la que ha vuelto a expresar su profundo respeto, en su intervención en un acto organizado por el PSOE en Zaragoza, en apoyo de la candidata del partido a la presidencia de Aragón, Eva Almunia".

"El jefe del Ejecutivo, ha defendido la reforma laboral y, pese a las críticas recibidas por parte de los sindicatos, ha asegurado que mantendrá el objetivo del diálogo social, más allá de la huelga general porque hay muchos cambios que hacer, en el ámbito laboral, social y en el sistema de pensiones, que aconsejan la máxima capacidad de concertación".

"Como presidente del Gobierno, os puedo asegurar que volcaré todos mis esfuerzos para tener ese diálogo con los sindicatos, y con la patronal", ha recalcado el líder socialista".

"Pero al mismo tiempo, ha llamado a la responsabilidad para salir de la crisis, y para crear expectativas de empleo y, por ello, ha pedido que se planteen iniciativas, porque ha dicho que respeta "la crítica y la descalificación", pero "parece razonable que se presenten propuestas".

"Eso es lo que el Gobierno quiere compartir, y está dispuesto a hacer el máximo esfuerzo de diálogo", ha insistido".

"Por su parte, el vicesecretario general del PSOE, y ministro de Fomento, José Blanco, ha defendido hoy la necesidad de reformas, como la laboral para garantizar un futuro mejor al país y ha criticado al líder del PP, Mariano Rajoy, por oponerse a todo, al tiempo que le ha recordado que "no está para dar lecciones".

"EL TRIO CON "¡¡JUERGAS GENERALES!!".