El Blog del Guti

"LOS VICIOS HACEN ESTRAGOS". Pensé que podía amarle; quería soñarle en silencio, y jugar los dos de amantes... Sin ponerle ningún precio. Lejano está su desprecio; aparté mi cobardía; soy un caballero recio... Que le amaba todavía. Ya apunta un bonito día; le cantan los ruiseñores, ya saben que la quería... Son pajáros muy señores. Los días en sus albores; las noches negras y oscuras, causante de mis dolores... De placeres y locuras. Se ha vuelto mujer impura; siniestra y avariciosa, sus carnes prietas y duras... Es una visión hermosa. Es muy fría y orgullosa; pero la gente murmura, pecadora y pretenciosa... Siendo una mujer madura. ¿Que le llevó a tal locura; si su apariencia es tan bella?, las relaciones no duran... Monólogos que se estrellan. Hermosa como una estrella; pícara y contemplativa, entre drogas y la botella... Se fue como un río su vida. Hoy muchos no la convidan; por ella bebían los vientos, la veo triste y a escond

 "ENCONTRÓ SU MISMA HORMA". Con un cuerpo tan macizo; comentaba lujuriosa, preocupada; mejor dicho... Por su cara tan graciosa.. Morena y muy orgullosa; un querubín hecho carne, un monumento en la tarde... Aunque un poco caprichosa. Yo que la veo muy hermosa; ¿supongo que es una broma?, se le ve tan candorosa... ¡Y sus pechos!; ¿son de goma?. Nacida en la linda Roma; allí tuvo siete amantes, apareció en Tarragona... Es bromista y muy liante. Su pelo negro y brillante; sus ojos, como luceros, aunque rara y muy distante... Soy muy hombre y caballero.. Es muy pija, con dinero; heredera con fortuna, viuda de un gran banquero... Con su piel color aceituna. ¿Vaya lineas, que soltura?; elegante y pretenciosa, pequeña de poca altura... Deliciosa y muy hermosa. En su pelo veo una rosa; con carácter de demonios, ¿es ángel o mariposa?... Oigo bien los testimonios. Se encaprichó de un tenorio; lo hablo y también lo digo, ahora lo tiene de no

"SÓLO QUIERO AMOR Y CARIÑO". .- Con licencia mi señora,  me abrazare a su cintura, vuestro cuerpo me enamora... Elegante en su finura. Ya se que todos murmuran; en verdad; vos sois tan bella, perdonad mi travesura... Vos brilláis como una estrella. A la caza voy por ella; me encanta vuestra melena, me habéis dejado tal mella... Por ser mujer verdadera. .- Mi marido me venera; ¿si procediera con gusto?, con sus besos me envenena... ¡No quisiera más disgustos!. Son muchos pecados juntos; me refiero a sus amantes, tendría que poner punto... Siendo cínico y galante. No es cristiano, es protestante; siendo yo mujer tan pura, mi marido es un farsante... Casi siempre tengo dudas. .- Vuestra voz; pura dulzura; vuestros ojos, es como el cielo, vuestros pechos una hermosura... Me frenan y me rebelo. Siento angustia y tengo celos; y me siento anonadado, mi buena estima en el suelo... ¡Me tenéis enamorado!. .- Vos me habéis conquistado; y mi