"ENAMORÉ A LA HIJA Y A LA MADRE".
"UN CAMBIO MUY ACEPTABLE". .- Que satisfacción tan plena; entre alhelíes y rosas, un día como un poema... Que brisa más olorosa. Viendo mozas tan hermosas; jugando con los infantes, habían chiquillas graciosas... Con sus damas tolerantes. La morena con su amante; vestía un corto vestido, la miraban los viandantes... ¿Dirán que eran pervertidos?. Soy un hombre divertido; canto en orfeón; y la tuna, lo que hayan convenido... Yo soy pobre y sin fortuna. ¡Nunca les pedí la Luna!; sólo les pedí un momento, como mujer sólo hay una... La que me da este tormento. Reina en mis pensamientos; es recatada y graciosa, guapa como un monumento... Agradable y orgullosa. Hermosa linda y preciosa; con un cuerpo impresionante, sus líneas eran hermosas... Con eso he dicho bastante. Me sobran las consonantes; yo la amaba y pretendía, la quería como amante... Por dentro me maldecía. Al cabo de pocos días; se presentó una señora, me dijo lo que querí