"EL GOLFISTA INGLÉS, "LUKE DONALD", GANA EL "PGA CHAMPIONSHIP" Y SE PROCLAMA NÚMERO UNO DEL MUNDO".

"UN SUEÑO IRREALIZABLE". "Tenia yo aproximadamente unos 17 años, cuando conoci a esta hermosa "yegua", de origen nórdico. Cuando la vi por primera vez, se encontraba como una"Diosa" tumbada en la fina arena de la playa de Salou". "Me miró, la miré, me volvió a mirar, y yo no paraba de mirarla. ¡¡Joder que melones!!- dije para mi. La rubita se acercó a mi con pasos medidos, pausados, como una autentica Pantera, que se dirige hacia su presa. Me sonrió, la sonrié, me miró, la volvi a mirar. ¡¡Joder, si no le habia quitado el ojo de encima!!". "Le pregunté con un hilo de voz, si hablaba el español, y élla, me contestó con una brillante y maravillosa sonrisa, que no entendia una puta mierda de español. Con pocos palabras y muchas indicaciones con las manos y gestos, que era de Suecia y estaba esperando a su hermana, la cual estaba todavia semi dormida en el Hotel". "Inocentemente, le pregunté, si era tan guapa como élla, y me contestó que era mucho más guapa. La verdad que a mis 15 años cumpliditos, y con el "machaqueo" de pesas, ginnasia, y más pesas, tenia un cuerpazo atlético y juvenil, vamos, un bomboncito de criatura. En fin, con señas, indicaciones inimaginables, me indicó que se marchaba al Hotel, pero que quedábamos para la noche, después de cenar". "Me dió la dirección del Hotel, un beso de "tornillo" y cogiendo la toalla de la arena sacudiendola, desapareció entre la muchedumbre, no sin antes, enviarme un beso con la palma de su bonita mano. ¡¡Joder, joder, joder!!. Me habia preguntado si tenia algún amigo, con las "mismas" condiciones fisicas mias, le respondí que sí, pensando en Pepe, mi compañero de ginnasio, un joven mayor que yo, aunque según él, una "máquina", para estos asuntos. Y ahí quedó todo, sólo en un sueño-realidad, que pude vivir, pero ni avisé a Pepe, ni fui a buscar a aquella magnifica yegua sueca". "¿Fué miedo a tratar a una mujer tan esplendida, como aquella?. Puede ser, pero ahora con mis 90 tacos, me arrepiento de no haberme portado como un "hombrecito" y darle la oportunidad a mi amigo Pepe, de dar un "zurriagazo" con la hermana de aquel bombón. En fin, en aquel tiempo, tenia una especie de novia, con derecho a "pernada" y era la culpable de hacer, que no me quedara ni uno sólo de mis espermatozoides". "Una verdadera ruina, pero tan buena o más, que la rubita sueca. Y esta es la historia triste de un "ligue" a mis 15 años. Siempre me acordadré de la bella Ingrid, como se llamaba la esbelta, talludita, y "tetona" sueca. Otro día, les seguiré contando los "ligues" juveniles. Chao amiguetes, hasta más ver.