"¿DESAPARECE EL AMOR Y LA PASIÓN CON EL MATRIMONIO?".

 

"DE SOLTEROS  A CASADOS"

Es la historia de un amor;
de una moza y de su amante,.
siendo un joven muy galante...
Le robo su corazón.

De solteros es la pasión;
de casados; una rutina,
una verdadera ruina...
Que acaba con el amor.

Con el tiempo hasta el cariño;
sólo queda la empatía,
es como la simpatía...
Sin mirar mas su corpiño.

¿Que pasó con la pasión;
aquel caprichoso intento,
que te dejaba contento...
Llenando tu corazón?.

Ser el dueño de su cuerpo;
en tu estomago cosquillas,
sintiendo la maravilla...
Del picoteo de un cuervo.

El cuerpo de una chiquilla;
su berborrea y su acento,
a rosas huele su aliento...
Su cuerpo te maravilla.

En la tarde en sus mejillas;
paseando por el río,
con la brisa coge frío...
Sentada en la misma orilla.

.-¡Vamos a casa chiquilla!;
que la tarde trae su aroma,
y no discutas, y sin bromas...
Y no me des zancadillas.

Y así comienza la tregua;
se acabo la soltería,
las cosas sin alegría...
De un bombón; pasa a la yegua.

.-¡Mariano que estoy a gusto!;
quiero disfrutar la tarde,
que esta brisa se retarde...
Y que no me de disgustos.

Soy feliz y estamos juntos;
¿no lo ves que hasta sonrió?,
contenta junto a este río....
Y muy ardiente y a punto.

.-Mujer que hasta tengo frío;
y aunque estamos en primavera,
en el río, en su ribera...
Con la brisa no me fío.

 

"SEGUNDO ACTO:

-¡Mariano no seas blandengue!;
que traigo buena merienda,
y si este tiempo no enmienda...
No comerás mis merengues.

No se podía discutir;
con su palique me gana,
grita como una fulana...
Tarda poco en discurrir.

La veo tan guapa y hermosa;
tan bonita gachupina,
siendo lista y siendo fina...
Orgullosa y tan graciosa.

.-Mariano, quiero un beso;
ahora no hay casi gente,
un beso que sea inocente...
Y me abrazas, que no peso.

Que bonita y picaruela;
sabia todos mis defectos,
más también siendo muy recto...
Tan dulce como una breva.

Cercana habían tres higueras;
y su fruto era maduro,
yo fumandome un buen puro...
Lo apagué muy a la ligera.

.-¡Mariano que estoy esperando!;
¿no me darás el capricho?,
¡mira que yo soy un bicho!...
Y ahora te estás retrasando.

.-Voy a coger unas brevas;
y que las coma mi niña,
que te agradan, no me riñas...
Dejame que haga la prueba.

.-¡Mariano que es peligroso!;
aunque me chiflan las brevas,
no quiero que tu te muevas...
¡Anda ven y no seas soso!.

El comentario gracioso;
que otrora se lo negaba,
ahora ya no le alegraba...
De aquellos ojos preciosos.

.-¡Puede venir hasta el dueño!;
no busques complicaciones,
en el mercado hay mejores...
Y ahora me ha entrado hasta sueño.

-¡Está bien vamos a casa!;
y tu con los pies en el río,
vas a coger hasta frío...
Aunque seas de buena casta.

 

"TERCER ACTO:

.- Ya sabes que no me fío;
y traigo mi chaquetilla,
son las cosas de chiquilla...
Por si me cogía frío.

Cogió su bolso y la cesta;
era muy fuerte la moza,
muy linda pero algo sosa...
Si se aproxima la siesta..

.-Aun recordaba las fiestas;
cuando aun eran amantes,
él tan fino y muy galante...
Siempre llevaba la cesta.

Cuando se abrió su melón;
cogió una buena tajada,
y la montó a horcajadas...
Le rompió hasta el camisón

El varón también pensaba;
los tiempos habían cambiado,
en aquello había temblado...
Cuando la tenia amada.

.- Le daré un beso en la boca;
y un pellizco en el trasero,
lo tiene como un brasero...
Y se pondrá como loca.

.-¡Mariano no me discurras!;
que ya no tengo ni frío,
aunque a la vera del río...
¡Ni siquiera se te ocurra!.

Con tres besos en su mejilla;
y un mordisquito en su oreja,
como lo hacen las parejas...
Se me reía la chiquilla.

La veo y me maravilla;
morena y siempre dispuesta,
no me negaba mi apuesta...
Siempre teníamos rencillas.

La admiraba por su cuerpo;
más también por su hermosura,
como amante era dulzura...
Siempre me dejaba hueco.

Era una fruta madura;
la desee tanto tiempo,
ahora que no voy con tiento...
Con ella no tengo dudas.

Talento con su alegría;
muy besucona y mimosa,
riendo era muy graciosa...
Me alegraba en mi agonía.




"CUARTO ACTO:

Aun recordaba aquel día;
que le declare mi amor,
me quemaba la pasión...
Y dijo que me quería.

Ya tenia su corazón;
y aquel cuerpo tan hermoso,
con dos hoyuelos graciosos...
Con su amor y mi pasión.

.-¡Mariano!; ¿que estás pensando?,
no ves que ya tengo frío,
que aquí en la orilla del río...
Con mis carnes refrescando.

Fuimos al aparcamiento;
donde teníamos el coche,
la tarde se hacía de noche...
Comentó su atrevimiento.

.-¡Mariano me viene el vicio!;
¿te gustaría ser mi novio,
me acuerdo de aquel tenorio...
Con buenas manos y oficio.

.-¡No provoques Mikaela!;
lo mismo estaba pensando,
y me lo estoy repasando...
Eres como una candela.

Hay parejas en sus coches;
pero son unos novicios,
tienen hambre y tienen vicios...
Y esto está lleno de noche.

.-Pues seamos una una pareja;
y hagamoslo en el coche,
sería un bonito broche...
Si terminamos entre rejas.

-.¡Mikaela no seas boba!;
que aquello ha quedado lejos,
que ya somos dos pellejos...
Y tu ya no eres tan loba.

Como ven en esta historia;
se han cambiado las locuras,
hay un muro con sus dudas...
De aquello que fue una gloria.

Ahora son peras maduras;
atiborradas de carne,
no hay deseos por la tarde...
¡Ya no hay nada si me apuran!

La soltería es una cosa;
ya lo dicen los poetas,
que si la hambre no aprieta...
La relación no es hermosa.

"Guti". "El romancero".

 
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