.- Así comenzó mi vida.
Mi madre ofreció sus tetas.
Recuerdo fueron queridas...
De la leche estaban prietas.
Yo dormia ella despierta.
La leche por sus pezones.
Con mis manitas abiertas...
Como viejos corazones.
Eran nuevas relaciones.
Con mi alimento diario.
Nunca tuvo vacaciones...
¡Era un caso extraordinario!.
Soy un hijo agradecido.
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