"NO HAY "MACHISMO", HAY AMOR, CARIÑO Y RESPETO".
"MI JACA MORENA"
"Allá va mi jaca bella;
jaca valiente y templada,
una yegua con estrella...
Que liba al viento sus ansias.
Con su melena morena;
con sus uñas como garras,
su belleza no es terrena...
Y su visión me desgasta.
No quiero que me domine;
no quiero y quiero montarla,
trabajo tengo al dormirme...
Pensando como encararla.
Que exigencia y vaya cuerpo;
que experiencia más centrada,
me encuentro que ya no quepo...
Con ese cuerpo de Hada.
Es algo que no acierto;
que me atraen sus amores,
tengo mucho desconcierto...
Y al verla me entra calores.
No es este oficio de cuerdos;
si la cuerda está templada,
en su cabeza y su acento...
En sus ojos y en su cara.
Hilvana sus devaneos;
desnudadose en el prado,
no me apellido Mateo...
Porque me tiene templado.
Como jaca jerezana;
al pueblo escandaliza,
es terror de puritanas...
Arreadole palizas.
Le gritan hembra morena;
por más que les haga "mangas",
le han cogido una perrera...
Que yo no le quito nada.
Ni pienso ni les arriendo;
las ganancias más sagradas
yo ya la tengo queriendo...
A esta hembra que es zagala.
Quién se encarama con ella;
a quién le saca sus garras,
rauda como una centella...
Y la vencida que rabia.
Uñas y espolones gasta;
la pérdida de su bata.
Que alivio cuando me canta...
Pero siempre me maltrata.
Me siento como un demente;
¡no quiero!... ¡¡Y quiero montarla!!,
¿por Dios cuánto ruido mete?...
La engancharia a mi tartana.
Y en su mirar aparece;
el odio de una gitana,
la miro y desaparece...
Con sus aires de Triana.
En hombres no tengo miedos;
con estas perlas saladas,
estoy loco sin remedio...
Cuando las veo tan cansadas.
Las tres mujeres me engañan;
son mujeres, tres contadas,
rubia, morena y castaña...
Mis tres yeguas jerezanas.
Aqui se acaba la historia;
de un hombre que está febril,
pero que vive en la gloria...
Duerme come y es feliz.
"Epílogo:
"No preguntéis por saber;
si las tres fueron felices,
comían pan y cebolla...
Mientras yo comía perdices",
"Guti".
"Allá va mi jaca bella;
jaca valiente y templada,
una yegua con estrella...
Que liba al viento sus ansias.
Con su melena morena;
con sus uñas como garras,
su belleza no es terrena...
Y su visión me desgasta.
No quiero que me domine;
no quiero y quiero montarla,
trabajo tengo al dormirme...
Pensando como encararla.
Que exigencia y vaya cuerpo;
que experiencia más centrada,
me encuentro que ya no quepo...
Con ese cuerpo de Hada.
Es algo que no acierto;
que me atraen sus amores,
tengo mucho desconcierto...
Y al verla me entra calores.
No es este oficio de cuerdos;
si la cuerda está templada,
en su cabeza y su acento...
En sus ojos y en su cara.
Hilvana sus devaneos;
desnudadose en el prado,
no me apellido Mateo...
Porque me tiene templado.
Como jaca jerezana;
al pueblo escandaliza,
es terror de puritanas...
Arreadole palizas.
Le gritan hembra morena;
por más que les haga "mangas",
le han cogido una perrera...
Que yo no le quito nada.
Ni pienso ni les arriendo;
las ganancias más sagradas
yo ya la tengo queriendo...
A esta hembra que es zagala.
Quién se encarama con ella;
a quién le saca sus garras,
rauda como una centella...
Y la vencida que rabia.
Uñas y espolones gasta;
la pérdida de su bata.
Que alivio cuando me canta...
Pero siempre me maltrata.
Me siento como un demente;
¡no quiero!... ¡¡Y quiero montarla!!,
¿por Dios cuánto ruido mete?...
La engancharia a mi tartana.
Y en su mirar aparece;
el odio de una gitana,
la miro y desaparece...
Con sus aires de Triana.
En hombres no tengo miedos;
con estas perlas saladas,
estoy loco sin remedio...
Cuando las veo tan cansadas.
Las tres mujeres me engañan;
son mujeres, tres contadas,
rubia, morena y castaña...
Mis tres yeguas jerezanas.
Aqui se acaba la historia;
de un hombre que está febril,
pero que vive en la gloria...
Duerme come y es feliz.
"Epílogo:
"No preguntéis por saber;
si las tres fueron felices,
comían pan y cebolla...
Mientras yo comía perdices",
"Guti".
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