"LOS REBRINCOS DE LA VIDA".

"DE FULANA, A GRAN SEÑORA".

Siempre que veo a las ingratas;
que con gustos y aficiones,
no compran cosas baratas...
Con buenos picos de halcones.

Sus bravatas al tres por cuarto;
al menor detalle en cueros,
tratan de hacerse un retrato...
¿Y quien paga; ¡¡Don dinero.

La tierra hay que trabajarla;
las cosechas se recogen,
el dinero se rebaja...
Y las mujeres no escogen.

Al rico nunca lo entierran;
al pobre casi lo olvidan,
en un socavón de tierra...
Con sus prendas más queridas

Corriendo van por el monte;
muy cerca de "Torres-Pinos",
¡¡aquí no torea Belmónte...
El que más, se porta fino.

Hay mujeres muy hermosas;
cabalgando en yeguas tordas,
son lindas y muy preciosas...
Son bonitas y no son sordas.

-No me atormentéis así;
¿que tengo yo de fulana,
se podría predecir...
Que maltratáis la sotana.

Tengo una fuente dorada
con un surtidor muy fiero,
eso es a lo que vos gustaba...
¡¡Y encima pagáis dinero.

Yo seré reina entre mil;
cuando pierda mi belleza,
rica me quiero dormir...
Y no llorar mis tristezas.

-Esto que ves es precioso;
con dinero tengo Villa...
con este río tan hermoso...
Con tres ojales de hebilla.

Allí en los robustos pinos;
muy cerca de la Alameda,
me he bebido más de un vino...
Con damas y damiselas.

Y los olmos que son recios;
igual que mis tres jardines,
suelen mirarlos los necios...
Rosas, claveles y jazmines.

Y tu que todo lo sabes;
podrás ampliar tus andadas,
y en un futuro no salves...
A tantas gentes malvadas.

De terciopelo y de seda;
y con perfumes muy caros,
igual que la "Magdalena"...
Y pasar hambre, muy raro.

Perlas que adornen tu frente;
aderezadas con joyas,
este será el referente...
Y no serás "malafolla".

Este sería tu futuro;
vivirías de "sobrina",
ante la gente es muy duro...
Sería peor en la esquina.

Ahora tenéis tal belleza;
y un cuerpo lindo y precioso.
nunca tendréis más tristezas...
Con la Religión y el gozo.

Espero a bien admitáis;
y os ruego contestación,
esta señal que me dais...
Será la amonestación.

Predijo cual quien medita;
tal sermón a horcajadas,
no era tan mala y maldita...
La cosa venia encajada.

Y siendo bellas tus flores;
con tiestos de porcelana,
tu me darás tus amores...
De tarde, noche y mañana.

-La joven miraba al cura;
le llevaba 30 años,
como el cariño perdura...
No le causaría tal daño.

Asintió con la cabeza;
volvió en silencio la cara,
y el cura con tal destreza...
Puso la cara muy rara.

¡¡Haces bien querida niña;
ya tengo más de cincuenta,
es posible que haya riña...
Lo será sin darme cuenta.

Desde mañana eres dueña;
presentate por la tarde,
y no seas pedigüeña...
Tal lo que ves, lo que arde.

La joven enfundo su ropa;
no sin antes las caricias,
de unos dedos como rocas...
Aquello no eran delicias.

¿Porqué brillarán tus ojos;
porque tan tierna sonrisa,
de mirarlos me sonrojo...
¡¡No te vayas tan aprisa.

Tus labios son dos Diamantes;
que relucen por la noche,
igual que pantera en "plante"...
Con un cuerpo de trasnoche.

De tus labios y tu sonrisa;
la paz de tu cuerpo mana,
tan dulce como la brisa...
Con verdores de mañana.

Mañana prepara el cuerpo;
te esperaré con anhelo,
ya sabes que soy muy cuerdo...
Siendo torpe, soy de hielo.

Ata tu negra melena;
y te lavas bien la cara,
¡¡ven como la "Magdalena"...
Aunque te encuentres muy rara.

Y acabando esta historia;
aquello duró muy poco,
a los sesenta a la gloria...
Pero se murió muy loco.

Señora con siete casas;
y un caudal muy fabuloso,
se buscó un mozo con casta...
Joven, guapo y muy chistoso.

"Guti".