"TODO UNA VIDA DISCUTIENDO".
"Foto: JPG.
"LAS BODAS DE ORO".
Esta vez déjeme en paz;
que seas feliz en la fiesta,
sólo y quieto en soledad...
Cansado guardo la siesta.
Solamente estoy herido;
más soy feliz en mi feudo,
aunque tampoco he querido...
Por ser feo y ser muy serio.
Cojo papel y la pluma;
veo a unos niños con juegos.
muy desnudos y con hambruna...
Con frío y algo de fuego.
Aunque me duerma escribiendo;
les escribo muy paciente,
siempre acabo recibiendo...
Por ser hombre muy decente.
Mi Alias lo dice todo;
me llaman el "Tío Perico",
montado en caballo tordo...
Nunca he conocido un rico.
Los pajarracos arriba;
en el monte hacen guiños,
con sus vuelos espabilas...
Disfrutando como un niño.
Este mundo está podrido;
con gentuza tan cebada,
que muy pocos han podido...
Hacer buena su arribada.
Hoy tu boca está sellada;
tu lengua ha quedado seca,
hoy no te veo muy cansada...
¡¡Quieta fiera; no seas terca.
Hoy respiro muy tranquilo;
porque tu lengua está quieta.
engordando más de un kilo...
Aunque duerma estoy alerta.
A mí no me has molestado;
mejor dicho, estoy muy serio,
eso sí, estoy tocado...
Para ti no es un misterio.
A mí sólo me preocupa;
que me pongas algo cuerdo,
con aquello que te ocupas...
Unos ciegos y otros tuertos.
Con el pasto en la llanura;
y la arena en esas playas,
ya no tengo esa soltura...
Y tu cuerpo me empalaga.
Son muy duros tus pecados;
también son mis sufrimientos,
¿dime yo que te he negado...
No te quedan sentimientos.
¿Que corre por esas venas;
buena sangre, o mal veneno,
ya hueles a hierbabuena...
Te he querido y te venero.
Por mis manos han pasado;
mozas de lindes extrañas,
pero nunca he compensado...
Si alguna vez tu me engañas.
Me enciendes cuando te miro;
también me pones furioso,
trabajando si transpiro...
Más te miro muy curioso.
Con las espigas tan verde;
con amapolas tan rojas,
el campo nunca se pierde...
¿Y tu me dices que escoja.
Me hablas de un accidente;
tal vez he tenido culpa,
de que seas reincidente...
De que no seas tan culta.
Llevas las manos heridas;
deja que cure tus brazos,
eres mi mujer querida...
¡¡Ven aquí, dame un abrazo.
Ven aquí hermosa mía;
que te limpio ahora ese daño,
con lo que yo te quería...
Pero ya han pasado años.
Aún recuerdo tus caricias;
y aquellas noches de invierno,
te reías; ¿que delicia...
Con un amor bueno y tierno.
Y tu gozando en mi cama;
con tu cuerpo sudoroso,
te acariciaba con calma...
Siendo un hombre pudoroso.
Soy un pellejo muy tierno;
aunque aparente ser joven,
pero en estado tan yermo...
Precavido, más con orden.
Tus ojos eran dos luceros;
tu piel canela morena,
¡¡no me hagas más pucheros...
Que me corroen las penas.
Tus vestidos sin costura;
me encantó tu cuerpo hermoso,
mi amor por ti aún perdura...
Ya que soy muy cariñoso.
Muchos años han pasado;
batallas y cien mil rencillas,
y de broncas estoy cansado...
Y de verte tus trencillas.
Quiero paz y aquí haya gloria;
quiero tenerte en mi brazos,
dejemos de tanta historia...
Para envolverte en abrazos.
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