"UN EXTRAÑO ENCUENTRO".

"ENCUENTRO CON UNA DIOSA".

De tal caminata infame;
quedé rendido en la hierba,
porque quería despejarme...
En un tumulto de piedras.

Profundamente dormido;
soñaba cosas muy raras,
en ayunas y mal comido...
Por mi culpa y malas caras.

Por fin cogiendo el buen sueño;
me topé con regia dama,
díjome no tener dueño...
¡¡Ay por Dios, este sueño clama.

Me preguntó por mi nombre;
era alta y bien vestida,
no recordé siendo hombre...
Que aquel sueño era mentira.

Iba vestida de largo;
con un color semi-rosa,
¿lo habría comprado de encargo...
Porque la dama es preciosa.

Se insinuó tan cercana;
con además lujuriosa,
que me surgieron cien canas...
Cuando la vi tan furiosa.

Ella se acercó a mi cuerpo;
y se fundió en un abrazo,
medio loco, medio cuerdo...
Con mi hambre y mi retraso.

Se quitó el largo vestido;
la hermosa dama desnuda,
ya estaba tan pervertido...
Que la dejé medio muda.

Noté un picor en la lengua;
saboreé su " jardín,
más seguí no dando tregua...
Su olor no era jazmín.

Pelos largos y rizados;
como un matorral infecto,
lamiendo y traicionado...
Por un cuerpo tan perfecto.

No penséis que estaba loca;
cuando besaba mi cuerpo,
lamiéndome hasta la boca...
Con picotazos de cuervo.

Para saber si era un sueño;
me pellizqué en el trasero,
remedio para un mal dueño...
Si se duerme en un trastero.

¡¡Horror; ¿que vieron mis ojos,
un perro lamia mi cara,
¿que vergüenza, que sonrojo...
Me reía por ser rara.

Más sigo muy deprimido;
limpiándome bien las babas,
porque nunca he conocido...
A una mujer como un hada.

Anduve por el lindero;
cabizbajo por vil sueño,
sin comer y sin dinero...
Sin trabajo y sin un dueño.

"Guti".